
Imagen de la Virgen de la Caridad del Cobre / Ochún, patrona de Cuba, que acompañara al poeta Gastón Baquero.
Santa Madre de Dios, Virgen amantísima de los cubanos,
Virgen de la Caridad del Cobre, Ochún, o como te llames,
Danos tu claridad por vivir cuando poco incita a hacerlo
Y protégenos de todo mal, sobre todo de nosotros mismos.
Perdónanos por nuestros pecados y danos la fuerza que falta
Para perdonar a quienes pecaron por ti y contra nosotros.
Protégenos de todo mal y que un día podamos aprender
A protegernos por nosotros mismos y de nosotros mismos.
Santa Madre de Dios, Virgen amantísima de los cubanos,
Virgen de la Caridad del Cobre y Ochún, no nos dejes caer
En la tentación de creernos un pueblo elegido para amar
Ya que el amor es parte del odio y ese nos tiene partidos:
El alma en un lado y el cuerpo como islas de la nada.
Déjanos amar pero también pensar, sentir y caminar
Como una familia que ha perdido todo y necesita de ti
Y de nadie más para levantar un techo en cualquier lugar.
No importa que no sea en esa isla maldita por excesos
Y defectos como la ceguera que nos impide frente al espejo
De tus ojos cristalinos ver lo que realmente somos tus hijos.
Virgen de la Caridad del Cobre, Ochún, no bailes, detén los ríos
Y la gracia de tu cintura frente al macho y pide por nosotros
Que nos estamos muriendo de abandonar tu casa de palmeras.
Pon tu miel en todos los caminos del regreso y líbranos del mal
Aunque sea una vuelta con la muerte para sembrar tus aguas.